Sicarios acabaron con su vida a balazos, en la puerta de su vivienda en Chincha
Roberto Huamán Salvatierra (32), es el sujeto que fue ultimado a balazos a unos pasos de su vivienda, el mismo día que había recobrado su libertad, luego de haber cumplido su sentencia en el Establecimiento Penitenciario de Chincha.
Sus malas decisiones lo llevaron a cometer actos al margen de la ley, como consecuencia fue recluido en el penal de Chincha. Pese a ello Huamán Salvatierra conocido como «Fitin», le había prometido a su familia que tras cumplir su condena, iban a empezar de nuevo y que las cosas mejorarían.
Fue domingo 15 de diciembre, el día en que Roberto Huamán fue excarcelado y apenas pudo encontrarse con los suyos por algunas horas. Ese mismo día, a pocos metros de llegar a la puerta de su casa, él es atacado por peligrosos sicarios, quienes al identificarlo desataron una feroz balacera en su contra, que terminó con el cuerpo ensangrentado de la víctima, tendido en el piso, y brotando sangre de sus heridas.
Aun con vida, el ex convicto, fue auxiliado por familiares y vecinos, quienes lo trasladaron de emergencia hasta el Hospital San José de Chincha. En ese nosocomio, habiendo transcurrido unas horas de su llegada, y debido a la gravedad de sus lesiones, los médicos de turno certificaron su deceso.
DETALLES. Algunos testigos habrían notado que el autor de los disparos fue un delincuente encapuchado, quien huyó de la escena del crimen tras cerciorarse que había cumplido la orden encomendada.
La policía maneja la hipótesis que el asesinato responde a un presunto ajuste de cuentas o asesinato por encargo por orden de alguna organización criminal que opera al interior del penal chinchano.
Cabe precisar que según, figura en el sistema policial, «Fitin», contaría con antecedentes penales por los delitos de robo agravado, tráfico ilícito de drogas, y hurto agravado.
Personal policial, viene realizando las investigaciones pertinentes para dar con la identidad y el paradero de las personas involucradas en este sangriento hecho.
